Las modas vienen y van, y no nos sorprende que cada temporada se rescaten tendencias que parecían olvidadas. También, hay otras modas que perviven inalterables con el paso de los años, y es el caso de las prendas bordadas.

Los bordados son una técnica que encuentra su origen en la Antigua Babilonia, donde reyes y nobles adornaban sus ropajes con creaciones maravillosas. Los hilos que se usaban principalmente eran la seda, la lana y el lino, todos ellos de muchos colores, incluso dorados y plateados. Esta técnica resurgió con fuerza en 2016, pero sigue imponiéndose en este 2017.

Las prendas elaboradas con bordados tienen un aire romántico, y pueden aportarle a nuestro look, elegancia y feminidad. Existen diferentes tipos de bordados:

• Bordados con o sin relieve: Se crean diseños lisos que apenas sobresalen de las prendas y diseños con mucho relieve, que se bordan fuerda de la prenda y se cosen a posteriori.
• Bordados dependiendo del material: También podemos diferenciar los bordados según el material con el que estén confeccionados, ya sea con canutillos, perlas, con hilos metalizados, etc. Por otro lado, se tiene en cuenta el tipo de punto; de cruz, cadeneta, lagartera, realce…
• Bordados según la forma: Existen bordados de diferentes formas o contornos.

En las tiendas podemos encontrar todo tipo de prendas con bordados, combinados con pedrería y transparencias. También, los podemos encontrar en ropa denim, ya sean en unos jeans o en cazadoras.

Los grandes diseñadores también han caído en las redes de los bordados y lo podemos ver en las creaciones de Zuhair Murad o Valentino. Y tú, ¿incluyes los bordados en tus looks?